BETWEEN THE LINES (2002)
El desaparecido programa 'Boulevard' de Radio 3, me dio a conocer a esta fabulosa banda de Londres (Inglaterra) de la que ya escribí algo en su día, por ser una de mis favoritas. A pesar de que si dais a la etiqueta veréis que este disco tiene la misma portada que el otro que posteé, lo cierto es que técnicamente no es el mismo, o más bien sí, pero una parte de su segunda edición. Me explico. En su día atrapado por esos cambios de ritmo y su destreza para pasar de la tempestad a la calma, me hice con una copia de 'Finelines' su debut, para poco tiempo después despedirme de ella, puesto que se la dejé a una vieja amiga que partió con él en su maleta en un largo viaje a Sttugart (Alemania), del que nunca volvió, pues encontró su lugar en el mundo en aquella ciudad bávara, así que tras un año y medio de aquel suceso, me enteré de que se había publicado una segunda edición para el mercado británico que incluía un segundo cd con descartes, caras b's, versiones acústicas y otras rarezas. Ni que decir tiene que me apresuré enseguida a comprármelo de nuevo y de esta manera, pasado el tiempo decidí publicar primero la primera parte y guardarme para una ocasión como hoy el segundo. Este disco no se puede adquirir suelto, pero bien podría haber sido un disco en toda regla, pues aunque esté compuesto por temas descartados en un principio, iguala la calidad mostrada en las canciones principales que eligieron para su debut. Por otro lado decir que My Vitriol es un grupo extraño en su actividad, pues desde su concepción a principios de la pasada década, tan solo han editado un álbum y un ep (también han publicado varios singles esporádicamente). Tengo muchas ganas de que se decidan a sacar nuevo material, porque de hecho siguen en activo, pero como no sé si es bueno 'torturarse' con esa ilusión, lo mejor es refugiarme en esta joya, donde elevan su pasión por el grunge, el shoegaze, el pop y el rock alternativo a la categoría de arte. En 'Between the lines', podemos gozar de todos los ingredientes utilizados en su discurso, empezando por esa atmosférica instrumental llamada "Deadlines", que sirve de introducción letal a una experiencia sensitiva inimitable, y que tiene continuación con la monumental "Wait a minute", una pieza preciosa que conjuga a la perfección melodía e inmediatez, la tristeza nostálgica de "Windows and wall", en una reposada versión acústica del tema original (incluido en 'Finelines') transaparente y frágil, la brillante "Safety zones and crumbles zones", con una furiosa base drum'n'bass y unas guitarras portentosas, la descomunal "Vapour trails", donde bordan el ruidismo accesible con un estribillo poderoso pero dulzón, y que parece ser un guiño a sus admirados Ride (tal vez su mayor influencia junto a My Bloody Valentine y Slowdive) en el título, la enigmática mezcla de "Taprobane and losing touch", que en su versión original eran dos canciones individuales y que aquí unen fuerzas de modo acústico en virtud de la belleza, la soberbia revisión del "Oh father" de Madonna, que abruma y emociona a partes iguales para erigirse en una de las mejores relecturas que he oído nunca, la casi metalera "Moodswings", donde las guitarras se muestran contundentes sobre una armonía vocal prodigiosa, la curiosa y breve "Another lie", tal vez la pieza más dócil que han firmado hasta ahora y que cuenta con un sistema de grabación que parece desafinar los acordes dándole un cierto encanto de pesadumbre conciliadora, la rotunda "Static", artefacto grunge de filtro modernista y ritmo incansable, la excelente revisión acústica de su majestuoso "Always your way", su corte más emblemático y que aquí se introduce en nuestro corazón a perpetuidad, así que solo puedo añadir que tanto en esta versión como en la original, me parece una de las más bellas canciones de la historia de la música, sin exagerar en absoluto, la fijación pop de "Breakfast", que fue grabada en estudio sin ningún tipo de retoque, simplemente captando la magia del directo y que probablemente es la canción más edulcorada de su repertorio, y la emotiva "All of me", donde acaban de desnudarse por completo para cerrar, a mi juicio, una obra maestra de nuestros tiempos. Som Wardner, Ravi Kesavaram (ambos naturales de Sri Lanka), Seth Taylor y Laura Claire forman estos imprescindibles My Vitriol.
BETWEEN THE LINES (2002)
El desaparecido programa 'Boulevard' de Radio 3, me dio a conocer a esta fabulosa banda de Londres (Inglaterra) de la que ya escribí algo en su día, por ser una de mis favoritas. A pesar de que si dais a la etiqueta veréis que este disco tiene la misma portada que el otro que posteé, lo cierto es que técnicamente no es el mismo, o más bien sí, pero una parte de su segunda edición. Me explico. En su día atrapado por esos cambios de ritmo y su destreza para pasar de la tempestad a la calma, me hice con una copia de 'Finelines' su debut, para poco tiempo después despedirme de ella, puesto que se la dejé a una vieja amiga que partió con él en su maleta en un largo viaje a Sttugart (Alemania), del que nunca volvió, pues encontró su lugar en el mundo en aquella ciudad bávara, así que tras un año y medio de aquel suceso, me enteré de que se había publicado una segunda edición para el mercado británico que incluía un segundo cd con descartes, caras b's, versiones acústicas y otras rarezas. Ni que decir tiene que me apresuré enseguida a comprármelo de nuevo y de esta manera, pasado el tiempo decidí publicar primero la primera parte y guardarme para una ocasión como hoy el segundo. Este disco no se puede adquirir suelto, pero bien podría haber sido un disco en toda regla, pues aunque esté compuesto por temas descartados en un principio, iguala la calidad mostrada en las canciones principales que eligieron para su debut. Por otro lado decir que My Vitriol es un grupo extraño en su actividad, pues desde su concepción a principios de la pasada década, tan solo han editado un álbum y un ep (también han publicado varios singles esporádicamente). Tengo muchas ganas de que se decidan a sacar nuevo material, porque de hecho siguen en activo, pero como no sé si es bueno 'torturarse' con esa ilusión, lo mejor es refugiarme en esta joya, donde elevan su pasión por el grunge, el shoegaze, el pop y el rock alternativo a la categoría de arte. En 'Between the lines', podemos gozar de todos los ingredientes utilizados en su discurso, empezando por esa atmosférica instrumental llamada "Deadlines", que sirve de introducción letal a una experiencia sensitiva inimitable, y que tiene continuación con la monumental "Wait a minute", una pieza preciosa que conjuga a la perfección melodía e inmediatez, la tristeza nostálgica de "Windows and wall", en una reposada versión acústica del tema original (incluido en 'Finelines') transaparente y frágil, la brillante "Safety zones and crumbles zones", con una furiosa base drum'n'bass y unas guitarras portentosas, la descomunal "Vapour trails", donde bordan el ruidismo accesible con un estribillo poderoso pero dulzón, y que parece ser un guiño a sus admirados Ride (tal vez su mayor influencia junto a My Bloody Valentine y Slowdive) en el título, la enigmática mezcla de "Taprobane and losing touch", que en su versión original eran dos canciones individuales y que aquí unen fuerzas de modo acústico en virtud de la belleza, la soberbia revisión del "Oh father" de Madonna, que abruma y emociona a partes iguales para erigirse en una de las mejores relecturas que he oído nunca, la casi metalera "Moodswings", donde las guitarras se muestran contundentes sobre una armonía vocal prodigiosa, la curiosa y breve "Another lie", tal vez la pieza más dócil que han firmado hasta ahora y que cuenta con un sistema de grabación que parece desafinar los acordes dándole un cierto encanto de pesadumbre conciliadora, la rotunda "Static", artefacto grunge de filtro modernista y ritmo incansable, la excelente revisión acústica de su majestuoso "Always your way", su corte más emblemático y que aquí se introduce en nuestro corazón a perpetuidad, así que solo puedo añadir que tanto en esta versión como en la original, me parece una de las más bellas canciones de la historia de la música, sin exagerar en absoluto, la fijación pop de "Breakfast", que fue grabada en estudio sin ningún tipo de retoque, simplemente captando la magia del directo y que probablemente es la canción más edulcorada de su repertorio, y la emotiva "All of me", donde acaban de desnudarse por completo para cerrar, a mi juicio, una obra maestra de nuestros tiempos. Som Wardner, Ravi Kesavaram (ambos naturales de Sri Lanka), Seth Taylor y Laura Claire forman estos imprescindibles My Vitriol.
Justo estos días que estoy tan enganchada al disco que ya posteaste, voy y encuentro nada más y nada menos que su continuación. Y me ha encantado, con los mismos elementos que me gustan del primero. Aún no lo escuché las suficientes veces como para emitir un buen juicio, pero por ahor te puedo decir que la versión más acústica de "Losing touch" me gusta mucho más que la original, es preciosa.
ResponderEliminarQue tengas muy buen fin de semana!! Un beso enorme!!!
Estaba seguro de que te iba a gustar!! :)
ResponderEliminarSobretodo porque no varía mucho de lo mostrado en las diéciseis canciones que componían la primera edición. A mí las versiones acústicas me gustan mucho, salvo 'Always your way' que me parece insuperable en su primera versión...aunque esta tampoco está nada mal, la verdad. Además creo que aquí suenan mas melódicos todavía. La segunda canción y la versión de Madonna son las que mas me gustan, aunque insisto! todo su conjunto vale la pena.
Pasa un gran fin de semana tú también!
Besosmil!!