sábado, 29 de enero de 2011

APPARAT

WALLS (2007)

Al igual que hice el fin de semana pasado, he pensado dedicar estos dos días a un estilo en concreto con dos discos que me gustan mucho y que apuestan por eso que se ha dado en llamar indietrónica, desde un filtro casi instrumental. Apparat es el proyecto personal de Sascha Ring, un dj y músico de Berlín (Alemania), que ha editado siete álbumes a día de hoy, además de colaborar con artistas del género electrónico como Ellen Allien y Modeselektor (con quienes utilizó el pseudónimo Moderat). Su carrera ha ido evolucionando con el paso del tiempo variando un discurso inicial orientado hacía el techno dance, que más tarde pasó a sonar a música ambiental y que en estos momentos manifiesta su interés en diseñar sonidos en vez de beats. Sin lugar a dudas esta es su obra más completa, definida por los medios internacionales especializados en este tipo de propuestas como uno de los mejores registros de dream pop-electrónico de nuestros días, comparándolo con la labor de formaciones ajenas a su estilo habitual como los franceses M83 y los británicos Slowdive. Un trabajo muy interesante compuesto por trece piezas que cuentan cada una con una personalidad propia, dando un enfoque diverso a un disco de por sí excepcional, que lleva por título la palabra 'Walls', un nombre muy adecuado para una colección de temas que se encierran en su propio mundo de atmósferas y bellas orquestaciones capaces de transmitir emociones agridulces en lo más profundo de nuestro interior. Una maravilla sonora que nos conquista en espacios reducidos, en la soledad de nuestros pensamientos y en la reflexión de las ideas, sobretodo con sus cortes instrumentales, que hacen palpable esa emoción intimista, aunque sin desmerecer los que incluyen voces, porque estos van hacía otros lugares de nuestra mente, dando la opción de desconectar y mirar con cierto desenfado y fuerza de voluntad un horizonte que tarde o temprano llegará. Para saber de lo que hablo basta con escuchar "Not a number", que arranca al ralentí y va acelerando poco a poco hasta encontrar el nexo de unión ideal entre esa majestuosa sección de cuerda y los aparatos digitales, con cierta afinidad con la música tradicional japonesa, "Hailin from the edge", algo cercana al hip-hop en su línea vocal pero emparentándose a la vez con el trip-hop orgánico de Massive Attack en esa base sobria y ligeramente oscura, "Useless information", en onda Julian Fane y por consiguiente en consonancia con los últimos Radiohead, amasando con fervor toda la miga de la electrónica melancólica, "Limelight", con estremecedor ruidismo rítmico y destellos vocales hipnóticos, "Holdon", tal vez la más popular del disco por su aparición en la película 'Light the wick', la primera realizada en 3D sobre el mundo del esquí alpino y los deportes de aventura en general, que además de esto aporta los minutos más accesibles y comerciales del álbum por el cuidado de su melodía, "Fractales" dividida en dos pistas, una muy bailable y la otra cercana incluso al post-rock épico y afligido de los islandeses Sigur Rós, y que para mí escuchada de manera conjunta forma el mejor corte del lote, "Birds", tristona y emotiva canción que vuelve a recurrir a los violines para dar un toque de nostalgia sensible, "Arcadia", brutal derroche de energía pasional que la crítica avaló como la indiscutible reina del álbum, destacando la cercanía del tono vocal con el de Thom Yorke, "Headup", precioso destello progresivo de sorprendentes tintes shoegaze con un estribillo contagioso y "Over and over", en deuda con las referencias del sello alemán Morr Music, flirteando con el jazz y la mente inquieta de The Cinematic Orchestra, con un modo de cantar que recuerda a los alternativos Brad, proyecto paralelo de Stone Gossard de Pearl Jam(dudo incluso que hayan tenido contacto alguna vez con la música de esta gente, pero yo le encuentro cierto parecido) y dejando en el ambiente unos tejidos de transparencia muy agradables. Sublime. Sascha Ring se animó a formar una banda para interpretar estas canciones en directo y para ello recurrió a los mismos que le acompañaron en el estudio, es decir Raz Ohara, que tocó el piano y puso todas la voces y Jörg Waehner a la batería.

2 comentarios:

  1. Gran Burrino (i don´t even own a dog!)30 de enero de 2011, 18:40

    sOY UN CATETO! yo que creía que la entropía era la tendencia de las energías a igualarse... por ejemplo: el agua caliente al encontrarse con el agua fría... pero es otra cosa mucho más complicada que ni con la definición delante entiendo... lo que quería decir es que todo es un tira y afloja entre patronal y plebeyos, que si uno de los dos abusa durante un tiempo, al final ese poder encuentra la forma de igualarse

    en cualquier caso, que la lucha está todavía lejos de nosotros. Y que tenemos a grupos empresariales protegiéndonos, somos sus intereses.

    ya veo que estás a tope con el blog... si cogiésemos las tres o cuatro frases más personales que incluyes por crítica, podríamos reconstruir tu persona emocional.

    en el futuro te servirá como diario... y hay que tener un par (o ser mañico) para encabezonarse y tener la constancia que requiere el asunto.

    olé tus huevos!

    sigo con Olvia tremol control... y con Band of horses

    the dos is gone! the dog is gone!

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  2. Si, si, totalmente de acuerdo y no es por ponerme dramático, pero somos meras marionetas.
    Lejos de querer ser panfletario, te recomiendo que eches un vistazo a este vídeo (si no lo has visto ya), porque te puede resultar esclarecedor e interesante.

    http://video.google.es/videoplay?docid=8883910961351786332#

    Cambiando de tema y buscando uno mas alegre, soy un matao con esto del blog, jaja, y eso que ahora no actualiza a diario por norma, por culpa de los dischosos dolores de espalda.
    Me ha hecho gracia eso que dices que es como un diario, no me había parado a pensarlo, pero es cierto. También me gustará ver las chorradas que escribíamos ambos aquí en un futuro, ya que hemnos dejado para la posteridad una buena colección de chistes chichinabescos, jeje.
    Este ha sido un gran fin de semana, verdad? lo digo por la debacle blanca en el Reyno de Navarra, oé, oé, oé...bueno, bueno, nada de euforias como dice Pep, que queda muuuucho aún.
    Abrazotes!

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