THE SOFT PACK

THE SOFT PACK (2010)

Siguiendo la iniciativa a modo de consejo de bboyz en uno de los comentarios de ayer, cambio de tercio para dejar la tristeza reinante en el post de ayer y dedicar unas líneas a un disco de esos que levantan la moral y hacen recuperar el ánimo tras vivir días grises. Echando la vista atrás me ha pasado lo que posiblemente nos pasa a todos cada año, que observamos los discos que hemos destacado entre los que más nos han motivado a lo largo del ejercicio anterior y vemos como se han quedado en el tintero algunos de los que mejores ratos no han hecho pasar. Tengo en mente varios que he visto en otras listas, así como algunos que he descubierto gracias a ellas y entre los que estarían en los que simplemente olvidé, está este fenomenal debut de la banda de San Diego (California), The Soft Pack. Fue Lapor quién me puso tras su pista, comentándome que era un grupo muy excitante con un sonido directo y fresco, a razón de que esperaba encontrarlo por aquí tarde o temprano para poder debatir sobre ellos, y que si no lo pondría en un hipotético buzón de sugerencias, creo recordar (en realidad no estoy muy seguro de que dijera todo esto, debo aclarar, no sea que lea esto y piense que degenero sus palabras), con los que guardan cierta similitud en ese indie-rock de actitud y ritmo punk-rock que no inventa la sopa de ajo pero suena impecable. Al escuchar este primer lanzamiento del cuarteto californiano, me vinieron a la cabeza los debuts de Arctic Monkeys y The Hives, aunque también hay algo de Girls Against Boys (de hecho el disco está producido por Eli Janney, bajista y teclista de estos) a una velocidad menos en cuanto a crudeza, eso sí, y de Black Lips con la diferencia de que suenan menos gamberros y más pulidos que sus paisanos, pero si algo queda para los clásicos en su sonido es de cajón nombrar a The Ramones, tal vez la principal influencia a la hora de crear sus canciones en base a la sección rítmica. Su primera obra de título homónimo, representa un ciclón de ímpetu juvenil, de correoso rock'n'roll esporádico y de directa ejecución representada en diez notables canciones que se degustan de una tacada sin sobresalir ninguna sobre las demás, dando muestras de un empaque conjunto atroz que cuesta incluso describir con adjetivos de distinto significado, por eso me limitaré a decir que vale un imperio su adquisición por la energía de "C'mon", tan heredera de los antes citados Caesars en su estribillo, la consistencia de "Down on loving", una melodía con mucho gancho que atrapa al instante sobre una base certera que podría emparentarse con The Strokes, la adictiva "Answer to yourself", mi favorita del disco por su potencia controlada entre destellos pop enlazados a unos coros que recuerdan mucho al "Highly envolved" de los australianos The Vines, la ligeramente surfera "Pull out", que bebe tanto de The Stooges como de Pixies, ya que en los primeros segundos te parece estar remorando las sensaciones de la primera audición de 'Debaser', la luminosa "More or less", con esas guitarras tan emocionales y el poso tristón de sus estrofas creando un bello contraste, la resultona "Tides of time", que cobra vida con ese demoledor sonido de tendecia swing setentera, la agresividad desbocada de "Flammable", en la que muestran toda su querencia punk en un pildorazo de dos minutos y medio como mandan los cánones, y la cálida y nostálgica "Mexico", donde aminoran la marcha en busca de la serenidad y la cual me lleva a pensar inevitablemente en un plácido lugar donde me gustaría estar disfrutando de la más profunda belleza que he conocido nunca, una razón existencial que vela por mis sueños. The Soft Pack, que en un principio se llamaron The Muslims, pero que decidieron cambiar su nombre para no tener que aguantar más comentarios racistas e ignorantes en sus conciertos de parte de algún que otro 'redneck' borrachuzo, son Matt Lamkin, Matty McLoughlin, David Lantzman y Brian Hill.