viernes, 29 de abril de 2011

BRIGHTBLACK

ALA. CALI. TUCKY (2006)

Hemos llegado al fin de semana como alma que lleva el diablo una vez más y lo hacemos con un clima inestable que puede fastidiar los planes, pero tampoco pido gran cosa, ya que sigo animado por haber pasado unos gratos días en mi pueblo recientemente. Han sido jornadas de mucho movimiento en las que nos hemos juntado todos los amigos casi a diario y la verdad es que eso me complace mucho, porque si hay algo con lo que de verdad disfruto es con esas reuniones alrededor de una mesa donde todos nos ponemos al día después de un tiempo alejados. Hacía mucho que no coincidíamos todos por diversas situaciones (un par han sido padres, otros acostumbran a irse fuera por estas fechas...), y aunque pensaba que me iba a costar adaptarme a este cambio de ciclo, el de no salir de juerga como antaño y hacer una vida más treintañera, el caso es que me lo paso igual de bien o mejor y mi cuerpo lo agradece un montón al día siguiente (lo que me costaba antes recuperarme de las resacas, madre mía!). Y bueno, eso te posibilita también tener momentos de tranquilidad en los que disfrutar del paisaje que te rodea y a mí mi humilde pueblo y su comarca en general, me encantan. Bajo esa emoción de abandonar unos días la jungla urbana, siempre saco tiempo para darme un paseo por el monte, ir a ver como crecen los frutos de temporada en los terrenos de las afueras e ir a la casa que tenían junto a la estación mis abuelos, donde se crío mi madre y mi familia materna en general, a observar los trenes que pasan cada cierto rato. Me gusta sentarme bajo un árbol que hay allí, ponerme un disco en el mp3 y sentir una saludable paz interior. Eso conseguí el pasado viernes cuando disfruté de la calma, y ese aroma a madera mojada que produce escuchar la puesta de largo de esta banda de Marin County (Alabama), que editaba su puesta de largo hace ahora siete años, después de publicar un par de splits con Bonnie 'Prince' Billy. La concepción de esta obra es sabia y paciente, como si la simple contemplación de lo que nos rodea fuese a traernos todas las respuestas y es por ello que tal como sentía en aquel momento lo grato que era entrar en su ideario, sentía que debía compartirlo aquí al volver, porque este disco es sencillamente precioso. Transportar tus sentimientos a este tratado que mezcla el folk más bucólico con el slowcore, es una experiencia que reconforta al máximo y que nos lleva a pensar en que esa afable pareja que lidera el proyecto pasan sus días gozando de la belleza de la naturaleza, sonriéndose el uno al otro y captando todo lo que nos regala el destino. Seguramente por eso suena tan luminoso a pesar de estar lleno de silencios, tan fácil de encajar entre tristezas y desengaños, porque escuchándolo apetece cuidar de todo aquello que merece la pena en nuestras vidas. Con esos juegos vocales chico-chica dulcísimos como no se oían desde los primeros trabajos de Low, la steel guitar omnipresente, el sonido de grillos entre canción y canción o su batería naturalista dan ganas de mudarse al campo. Además en su página web hay un montón de enlaces a asociaciones a favor de la conservación de la naturaleza con lo cual queda claro su espíritu hippie, ese que hoy está tan olvidado porque muchos se encargaron de hacerlo artificial. Ellos son auténticos y creíbles y si no, poco importa, porque al menos nos obsequian con canciones tan bonitas como "New Mexico", impreganada de dulzura, lentitud apasionada y atmosférica tradición, ya que parte de los parámetros de la música de raíz americana incluso con el aporte de un órgano genuinamente sureño, "True bright blossom", donde asoman a la vez la mayoría de sus distinguibles referencias, es decir Galaxie 500, Mazzy Star, la cara amable de My Bloody Valentine y los primeros Grateful Dead, "Own time woodland song", en la que la voz de él coge un tono similar al de Matt Ward mientras de fondo vana cayendo los acordes de una cálida instrumentación country, "Better days", sabor a blues añejo y Ry Cooder en el horizonte, para conformar los minutos más sobrios del álbum, "Old letters", una preciosidad limpia, adorable, con las cuerdas de la acústica brillando sobremanera, ideal para cerrar los ojos y viajar imaginariamente donde uno desee estar, y "Oceanblue", otra que habría encajado en la banda sonora de 'Paris-Texas', partiendo de esa influencia de Ry Cooder que os comentaba antes, y que despide este disco que a pesar de pasar totalmente inadvertido en su día, nunca me cansaría de recomendarlo. Brightblack son Nathan D. Shineywater y Rachel Hughes, que por si fuera poco contaron con la ayuda de los hermanos Paul y Will Oldham, además del grupo coral Plush Canyon en los coros.

4 comentarios:

  1. ¡Estos sí que son alternativos de verdad!

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  2. Este es un disco del que tenía la completa seguridad que sería de tu agrado :P
    Los conocías ya? suenan bien verdad?
    Lo curioso es que parece un grupo clandestino porque hay muy poca información de ellos, así que si! son muy alternativos, jeje.

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  3. gracias txarls, he escuchado estos dias un par de disco muy buenos en tu blog, "The quiet Man" i "Lovers" discos de esos q no salen con 4-5 estrellas o con notables altos en las criticas, pero por eso no dejan de ser buenos.
    "Brightblack" tambien es una mezcla de Mazzygalaxistar500 q vale la pena.

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  4. Que bien anónimo!! me alegra tantísmo que aprecies esos discos menos poulares...me da penilla a veces no saber si os gustan a los que entráis por aquí de vez en cunado porque al final si subes algo de Radiohead, Wilco o Arcade Fire (por nombrar algunos que gozen de éxito masivo), sabes que hay mucha gente que los aprecia, pero con estos es más complicado, claro, jeje. Con lo The Quiet Man, pues más aún, ya que es uno de mis mejores amigos y siempre te alegra que guste lo que hace la gente que aprecias.
    Brightblack son geniales. Esa mezcla entre Mazzy Star y Galaxie 500 con un toque personal es muy grata verdad? :)
    Mil gracias por comentar y por pasarte por aquí, espero que sigas encontrando cosas de tu agardo a menudo y si no, me regañas y me dices 'oye, tío, a ver si publicas algo decente' y me das la idea, jaja.
    Un abrazo!

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