lunes, 19 de agosto de 2013

SPIDERS

NUEVAS RUTAS EN SONIDO (1973)

Muchas ganas tenía de postear este disco porque de alguna manera es el que da razón existencial a este monográfico setentero publicado estas dos últimas semanas por aquí. Fue el primero que escuché de esta maravillosa banda mexicana que para mi es la joya de la corona dentro de la enorme escena que se concentró en Guadalajara (Jalisco), despertando mi interés por sus coetáneos, y no sé si por ese valor sentimental que guardan las sensaciones iniciales, lo considero el más interesante a la hora de exponer un discurso desde la más distinguida aptitud. The Spiders es una de esas formaciones con pedigrí suficiente como para salir a flote de cualquier trauma y continuar su trayecto con la seguridad del que se siente ganador sin necesidad de entrar en competición, ni recibir medallas en caso de hacerlo. Sin embargo, dieron los pasos adecuados y supieron conservar con honestidad su nombre. Su actividad se prolongó hasta hace escasos años, completando un periplo de casi cuarenta y en mi opinión tiene un mérito enorme que su esencia se conservara hasta sus últimos días, en los que consiguieron reunir a una nostálgica legión de seguidores que aplaudieron a rabiar sus canciones en el que fue su concierto definitivo de despedida, reuniendo a gran parte de su formación original con motivo de un homenaje a 'El Tuky', su guitarrista más emblemático, que había fallecido unos meses antes.

Fue mi chica la que me recomendó la adquisición de este álbum con muy buen criterio, pues conoce mi gusto mejor que nadie y acertó de lleno. En una primera instancia, me pareció un grupo que ofrecía algo distinto a los demás y ahora que tengo un poco más de conocimiento de lo que hacían sus compañeros de generación, corroboro eso pero añado que en realidad todas las propuestas, teniendo puntos en común entre sí, aportaban algo diferente, con lo que el clan de bandas mexicanas de aquella década es digna de admiración por saber navegar con una identidad propia y brindar algo innovador (dentro de lo que cabía) a los amantes del rock de aquel entonces. No obstante, sin desmerecer lo que hacían por ejemplo Toncho Pilatos y el resto de coetáneos que cité en el post de les dediqué, Spiders estaban un peldaño por encima en cuanto a atractivo, pulcritud y calidad en general. Su discurso sonaba sobrio y seductor a partes iguales, su música acogía influencias más accesibles y su producción ganaba enteros respecto al resto en cuanto a minuciosidad.

No sé si he hecho bien en decantarme por su segundo álbum 'Nuevas rutas en sonido', porque tal vez el honor de haber sido uno de los polos de atracción del movimiento musical surgido en una ciudad que ya alzaba el puño y el clamor al son de los temas de ilustres como La Vida, La Solemnidad o Quinta Visión, se lo deben a su venerado debut 'Back', un trabajo que les puso en liza gracias a la brutal recepción que tuvo el corte que daba título al disco, elegido como sencillo de presentación en sociedad, pero yo le tengo gran aprecio a su sucesor porque pasó algo desapercibido una vez pasado el efecto novedad y creada una gran competencia, y por tenerlo más rodado, para que nos vamos a engañar. Esta obra me parece fascinante de principio a fin y me satisface poder echar unas líneas sobre lo que me inspira independientemente de considerarla mejor o peor que su predecesora. Cualquiera de sus tres referencias es notable, aunque por desgracia hubo mucho tiempo entre ellas, como pasaba con casi cualquier banda de entonces. Es curioso eso, supongo que por falta de medios, cualquiera de las formaciones de allí, tardaba una eternidad en editar material de continuación.

Los Spiders, que muchas veces prescindían del artículo en su nombre o simplemente lo plasmaban en inglés, casi siempre usaron esta misma lengua para transmitir su mensaje. Se fundaron en el lejano 1961 y dieron su primer concierto tras horas y horas de ensayos, en la fiesta de Quince de la hermana de un amigo. Un par de años después firmaron por un pequeño sello que les editó su primer Ep de seis canciones, cantadas en castellano en su totalidad y acabado el curso comenzaron a presentarse en los cafés más importantes de la Ciudad de México, donde se trasladaron en busca de fortuna. Conquistaron el corazón de los jóvenes chilangos y volvieron a casa en loor de multitudes. Al cabo de un lustro vio por fin la luz su puesta de largo antes mentada y de ahí a la eternidad. Apariciones en la televisión estatal, una larga sucesión de conciertos, numerosas ventas y el respeto del público que adoraba el buen rock'n'roll abierto a otros estilos.

Un banda de pura cepa que creó canciones como "You are the people (help yourself)", perfecta conjunción de alma blues con unas guitarras pesadas y una percusión lozana, "Just one of these days", suave tonada con un deje soul delicioso, una muestra de que iban más allá de lo habitual en la búsqueda de conceptos que adaptar a su imaginario, "Are you sure (you got me)", como juntar a The Beatles y The Rolling Stones en un viaje trotón de escasos tres minutos, "Won't be comin home tonight", mi favorita del lote, con esa intensidad progresiva que emula a los mejores The Moody Blues y los cortes más orgánicos de Tangrine Dream, interpretada con esa voz rota tan fácilmente identificable de su cantante, robusta, férrea, a golpe de baquetas histriónicas y riffs envolventes, "Without my lady (i'm feeling bad)", medio tiempo de cálida ejecución, un tema que puede recordar a los más grandes clásicos bordados en letras doradas en las páginas de las enciclopedias, "What you feel", nuevo cóctel de sabores, donde fluye el funk, con el soul el rock and roll, el blues y un ligero soplido psicodélico que recuerda mucho al "Sympathy for the devil" de los de Mick Jagger, "Pat pages", otro respiro para un disco que alterna electricidad con sutileza, y en este caso lo hace a marcha baja con una base rítmica preciosa que consigue hacer de esta una de las creaciones más completas e inspiradas de su discografía, "I'm so glad", que en un principio puede traer a la memoria al primer Joe Cocker y que para más inri está adornada con un coro de alma gospel, recurso que usaba mucho antaño y el de Sheffield (Inglaterra), "For you", elementos románticos de raíz para la más preciosa joya del repertorio, breve pero muy emocional y con mucho sabor americano, magia polifónica que encajaría hoy en el universo de Fleet Foxes del mismo modo que en el pasado habría podido pasar por un hit de Simon & Garfunkel, y "Goodbye (see you soon)", que en sus primeros compases emula al Bob Dylan de "Hurricane" y que luego pasa a convertirse en un agradable conato de humildad. Magníficos.

Spiders (que he olvidado mentar que antes de asentar sus denominaciones por completo también se hicieron llamar Los Spyders) eran Antonio Vierling Hernández, Manuel Olivera, Reynaldo 'El Tuky' Díaz Vélez, Servando Ayala y Enrique Chaurand, en el tiempo que se creó este muestrario.

2 comentarios:

  1. Guapo, es un placer jeje haberte hecho llegar esta banda, pues tu me regalas cada día algo que escuchar y enamorarme más de la música.

    Y creo que es una fortuna que este disco además de la música limpia y "bien ejecutada", la voz de Antonio Vierling deje mucha huella en la profundidad de sus notas, qué grande!.

    Posiblemente para muchas personas y en estos tiempos... este disco pase desapercibido y no les sea una obra maestra, sin embargo, a mi me logran emocionar y me doy cuenta que disfruto de un álbum sólido, con buenos arreglos y armonías impecables, haha no sé lo que digo, ya sabes que estas cosas de intentar describir lo que siento de un disco no se me da, y prefiero ok, tu me vas enseñando y hago un esfuerzo jaja... :)

    Y sobre "Won't be comin home tonight", me alegra que también sea tu favorita, pues baja, sube... no te lo esperas y pum! hace una deliciosa explosión!! y todos los instrumentos se sienten! y eso ya sabes que me gusta!...

    Besos amorosos!

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  2. El placer es mío al igual que el eterno agradecimiento.
    Si tuviera que hacer una lista con las cosas que me has compartido, me llevaría un día entero escribirla. Por ti estoy al tanto de las novedades y de viejos discos de los que no tenía consciencia.

    Antonio Vierling tenía (y supongo que seguirá teniendo) una magnifica voz con un timbre muy particular, eran un gran cantante.

    Da igual si es un disco infravalorado con el paso del tiempo, porque lo que cuentas es que nosotros lo disfrutamos y nos hace vibrar, no te parece? :D
    Me produce el mismo efecto que a ti, y cielo, de verdad, no me cansaré de repetirlo, nadie describe mejor que tú la emoción que produce un buen disco y además lo haces siempre con las palabras adecuadas, y eres tú quién me enseña a mi, no a la inversa. Soy un mero aprendiz de tu inteligencia ;)

    Que feliz coincidencia que nos guste preferencialmente el mismo tema del álbum. Si es que somos un equipo! jaja.

    Besos tiernos en toda tú!!!

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