miércoles, 13 de noviembre de 2013

RORY GALLAGHER

DEUCE (1971)

Me encanta irme de un extremo al otro entre entrada y entrada, la verdad, hay tantos estilos que no tendría sentido estancarse en unos pocos concretos y además no todos me sirven para soltar mi habitual historieta del pasado, del como llegó mi primera escucha del disco y esas cosas. Este artista en particular me da mucha cancha porque hace muchos años que su música entró por mis oídos y me da para contar pequeños secretos de mis inicios en esta afición, además de que el motivo de ponerlo hoy por aquí a través de este disco, responde a una petición de mi encantadora Sra. Smith, que disfruta mucho de los devaneos blueseros de este infravalorado clásico y me pidió postearlo a la menor brevedad posible (bueno, no me dijo eso, ella es muy prudente y en realidad sus palabras fueron 'cuando puedas y te apetezca, si es que quieres', pero como sus deseos son ordenes para mi, aquí estoy cumpliendo como un buen chico). Así pues si en mi último escrito describí mis sensaciones acerca de un disco que se puede considerar el adalid de la modernidad, para esta ocasión me alegra enormemente alabar un trabajo que sigue igual de fresco ahora que el día que se editó, a pesar de que han pasado la friolera de cuarenta y dos años desde entonces.

La primera vez que tuve conciencia de la existencia de este genial músico fue leyendo una entrevista que le hacían al incombustible Rosendo, del cual yo era admirador acérrimo en aquella época. El madrileño comentaba que a raíz de los discos de Rory Gallagher, ya fuera al frente de Taste o en solitario, comenzó a sentir un especial interés por tocar la guitarra y dedicarse en cuerpo y alma a la idea de formar una banda, y vaya si lo hizo, fundando una de las mejores que ha dado este país, Leño, pero bueno, esa es otra historia, la cuestión en aquel bis a bis con el periodista, explicaba con detalle su idilio con la sonoridad de aquel tipo y su pena de no haberlo conocido en persona, puesto que murió sin que se produciera un encuentro que a él le habría hecho una ilusión inmensa. Narraba todo con la devoción de un fiel devoto y antes eso no pude más que apuntar el nombre y correr al cabo de unos días, a las tiendas del centro para buscar algo de material de ese referente de mi ídolo. En 'balada y estanco', una tienda ubicada en la emblemática calle Pelayo de la Ciudad Condal, que tenía dos plantas de las cuales una era exclusivamente de viejos vinilos, cd's y cassettes en oferta, y que por desgracia desapareció con la crisis del sector, compré 'Tatoo' por quinientas pesetas. Fue mi primera adquisición y lo cierto es que me atrapó al instante, con ese blues de corte añejo algo enfocado al rock, y por supuesto que fuera fuente de inspiración de mi héroe patrio no era de extrañar, porque lo suyo sonaba muy cercano a lo que brindó el ilustre vecino de Carabanchel a sus seguidores. Muchos acordes prestados, afinidad con su línea melódica y esas letras con doble sentido que luego fueron marca registrada del Sr. Mercado.

Multiinstrumentista autodidacta por vocación familiar, provenía de la pequeña localidad de Ballyshannon en el condado de Donegal (Irlanda), aunque bien pronto se trasladó junto a sus padres a la vecina Derry y poco después a la poblada Cork donde vivió gran parte de su vida. Allí de bien crío tuvo su primera guitarra acústica cuando su edad se firmaba con un solo digito, y mientras practicaba echaba las horas muertas escuchando a Buddy Holly, Eddie Cochran y Muddy Waters, sus primeros tótems, en un viejo transistor en frecuencia modulada. Ya en plena adolescencia formó parte de Fontana, un sexteto que hacía versiones de grandes éxitos asociados al rock and roll, abandonando la nave cuando empezaba a hacerse un nombre para idear The Impact con quienes llegó a salir de su nación para actuar en la lejana Alemania. Siendo un recién estrenado vienteañero y a la cabeza de Taste, teloneó a Cream y a Blind Faith en sendas giras británicas y norteamericana, respectivamente, cumpliendo un sueño definitivo al incorporarse al cartel del famoso festival de la Isla de Wright, donde había gente como The Doors, Donovan, Jethro Tull, Supertramp, The Who, Jimi Hendrix, Joan Baez, Leonard Cohen, Sly Stone o Miles davis, entre otros. Su nombre ya estaba en el olimpo de los dioses, aunque tras está emocionante aventura, disolvió el grupo por diferencias irreconciliables y continuó su camino por libre.

Publicó su debut homónimo ese mismo curso y recibió multitud de aplausos de crítica y público, siendo elegido por la prestigiosa revista Melody Maker, como artista de mayor proyección por encima de una eminencia de aquellos días como era Eric Clapton. Era un gran disco, pero lo que sacaría después al mercado, que sorprendentemente sería incomprendido en su momento, fue su mejor logro, al menos en cuanto a pureza respecto a lo que significaba el discurso de este hombre. Si bien siempre he guardado un especial cariño al antes citado 'Tatoo', porque fue el primero que tuve en mis manos, de los catorce álbumes que compuso (dos de ellos en vivo), 'Deuce' quizá sea el mejor de todos ellos, el que mejor extrajo la esencia de su mensaje y el más coherente con sus formas. En otros trabajos estiró la manta para cubrir con matices country, rythm and blues, jazz y folk su ideario, pero aquí fue directo al grano y tan solo destiló genuino blues y férreo rock. El espíritu de Woody Guthrie, Big Bill Broonzy, Lead Belly, Lonnie Johnson y Chuck Berry, sus auténticos espejos, fluían mas aquí que en ninguna otra de sus obras y merced a ello podemos encontrar dentro temas imprescindibles de su legado como "I'm not awake", con esos aires medievales y ese zumbido psicodélico que acompaña esa manera de cantar tan personal como si nos recitará su vida desde el más allá, una canción sublime que posiblemente sea la más inspirada del lote, "Used to be", donde se ponía silvestre y eléctrico a rabiar, rozando el garage más primitivo de aire estadounidense, más próximo a Grand Funk Railroad que a cualquier otra cosa, "Don't know where i'm going", su deuda saldada con la accesibilidad, una pieza de liberadora consigna hippie que enamora con la presencia de la armónica, corta, sutil, simpática, para luego volver a rugir con "Maybe i will", una pista que bien puede considerarse emblema y ubre de un buen puñado de bandas actuales que le tienen en un pedestal, elevando el tono para ponerse serio y furioso sin perder la vocación de líder de una estirpe reivindicativa, "Whole lot of people", mi favorita, aunque es difícil anteponer una sobre las demás, pero es que es tan fantástica en su desarrollo y cambios de rumbo que casi que me atrevería a decir que es lo más impresionante que salión de su inagotable talento, acelerones, reposos, melodía soul, bajos punzantes y percusiones febriles, un pedazo de portento auditivo que incluso encajaría a las mil maravillas en revivales del pasado como 'Is this it' de The Strokes, clara muestra de lo bien que han envejecido su testamento, "In your town", descomunal virtuosismo al servicio de la contundencia, himno desgarrado concebido a base de sudor, sangre y sentimiento, ideal para entrar en su mundo, solo superada por la sensación de imaginar cuan monumental sería haberla vivido en directo, "Should've learnt my lession", blues fosilizado de piel negra, de esos de toda la vida, de los que daban color a los orígenes, apegado a la tradición y el cual sirvió seguro de modelo a Rosendo para su melancólico "Mala vida", ya le he citado antes para dar pie a como llegué a conectar con estas cumbres, "There's a light", fenomenal en su elegancia y vacilona en su ritmo trotón, explayándose a su gusto hasta sobrepasar los seis minutos de duración, "Out of my mind", que tontea con el bluegrass, y cruza acordes sobre versos prosaicos, dulces, cálidos, otra genialidad, "Crest of a wave", emocionante, potente, excitante, épica, la guinda del pastel, y "Persuassion", despedida y cierre en la que entra una distorsión abrasiva que rellena de músculo un final ya de por sí, clarividente.

William Rory Gallagher, murió hace casi diecinueve años (el 10 de Enero se cumplen) a causa de una inesperada infección que le llegó tras efectuársele con éxito un trasplante de hígado, que le tuvo que ser prácticada a consecuencia de sus problemas con el alcohol y la combinación de este con fármacos. Grabó este 'Deuce' con la ayuda de Gerry McAvoy y Wilgar Campbell.

9 comentarios:

  1. Tu hazle caso a tu señora, que te llevará por la senda correcta, je, je, además... para eso está. En fin, qué decir del "Dios de la Camisa a Cuadros", que su música, pura pasión, está plenamente vigente y que de infravalorado nada, quizás poco conocido (quién escucha hoy a los Free o a la J Geils Band, p.e.), pero sus fans que son legión le adoran, y con razón. La música de este hombre puedo escucharla sin cansarme, particularmente el 'Irish Tour', que procuro poner en el coche a la family a la mínima que puedo para irles educando el gusto y que no se descarríen mucho, más que nada (como no pueden salir les hago terapia de choque). ¿Sabías que el bueno de Rory fue bautizado en la Rock Church de Ballyshannon y que su padre trabajaba en una central eléctrica? joer, con esos antecedentes a qué otra cosa podía acabar dedicándose [en el documental 'El fantasma de Rory Gallagher' lo explican]. Rory falleció, Stevie Ray V. también, nos queda Johnny Winter que no sé si tiene para mucho, Walter Trout es muy bueno pero no es lo mismo.

    Preséntele mis respetos a su señora.

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  2. Y a mi me encanta de que te vayas de un extremo a otro , siempre encuentro curiosidad , sagacidad , conocimiento y algo que es importante para mí : HUMOR , buen sentido del humor .
    A lo que iba ... gran entrada , me tocas la fibra , Rory Gallagher es , como bien dice Joaquín , pura pasión , uno de los músicos que me han hecho creer en que la honestidad si es posible dentro de este negociado del rock´n´roll ; no olvidemos los orígenes , nos irá mejor.
    Ah ! Permíteme por favor decirle a Joaquim que soy de los que sigo escuchando a Free , Bad Company y la J. Geils Band , faltaría mas , son algunos de mis grandes referentes ; ahí estamos.
    Un Abrazo !

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  3. De lujo eso de ir de un extremo a otro si lo pide el cuerpo, querido Txarls. Mi álbum preferidísimo del irlandés al que le dediqué un post, ahí va si te apetece http://woody-jagger.blogspot.com/2011/11/rory-gallagher-1971-deuce.html. Curioso que lo descubrieras por Rosendo, o quizás no tanto. Abrazo.

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  4. Siempre! jaja, las mujeres siempre están un peldaño por encima de nosotros en sabiduría y yo le hago caso a pies juntillas, su opinión musical la tengo en un pedestal :D
    No sabes las risas que se echa cada vez que le haces mención, dice que eres más majo que las pesetas!

    Si, quizás 'infravalorado', no era la palabra adecuada, creo que meé fuera de tiesto, jeje, puesto que como bien dices, sus adeptos bien le recordamos. Era muy grande este hombre y un ejemplo de tesón que siempre hizo lo que quiso sin necesidad de llamar la atención más allá de lo que proponía con su obra. Por ahí leí que este disco tuvo poca acogida en su día y sin embargo él quedó satisfecho porque vendió diecisiete mil copias en el año de su edición...que pensaría de haber estado vivo cuando hace ocho años se le dio un disco de platino a título póstumo por haber vendido cien mil en total de ese mismo plástico?
    Maginifica la anécdota de la encerrona familiar con coartada Gallegheriana, jajaja, es por su bien, con el tiempo te lo agradecerán, estoy seguro que aunque pudieran salir no lo harían.
    Sabía lo de que Rory era hijo de un electricista y que tanto éste como su madre eran músicos a tiempo parcial más por hobby que por lucro, pero no tenia ni idea de lo de que había sio bautizado en la Rock Church, que con ese nombre tenía que ser bien premonitoria. Me apunto el documental, que no sabía de su existencia, que bueno!! siempre me dejas una perla a descubrir, que tío!

    Johnny Winter tiene cuerda para rato y Stevie Ray, Rory y otro grandes del género que se nos fueron, yo creo que no andan lejos, ni siquiera están muertos, como mucho eternamente dormidos, pero soñando con nuevas joyas con las que deleitarnos en reencarnaciones futuras.
    Ah!! y me aañdo a tu club y al del bueno de Jesús...J Geils Band y Free siguen sonando en mi casa
    Somos unos clásicos y a mucha honra :)

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  5. Hala, Jesús, que me sacas los colores, copón! jaja
    Mira que a veces me siento algo 'morroputa', (creo que esta palabra se usa también por tus tierras, así que imagino que me entiendes, jeje) poniendo todo por las nubes sin importar estilo ni época, pero es que hay tanta cosa sublime por ahí, y en fin, mis chorradicas humorísticas, jajaja, harina de otro costal, tengo un humor un poco alpargatero, que sepas que me controlo porque los que leéis lo que escribo no penséis que soy un payasete :D

    Bueno, que me voy por los Cerros de Úbeda...has dado en el clavo, la grandeza de Rory Gallagher (no puedo estar mas de acuerdo), es su honestidad, lo que veo en su historia es que fue un buen tipo y que su música lo transmite en cada nota. En una indústria tan salvaje, donde tienen cabida mil actitudes discutibles y mucho divismo, él era un hombre honrado y afable, más que suficiente para que le admiremos y disfrutemos de su legado.
    Y aprovecho para decir a Joaquim desde aquí, ya que se me ha ido la olla a Camboya en la respuesta que le he dado y he olvidado mentarlo, que si echa un vistazo a tu blog, disfrutará mucho, pues tenéis gusto muy afines, ahí queda dicho :P

    Un abrazo grande!

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  6. Que bueno que lo veas bien Johnny, lo cierto es que para mi es un modo de alternar sin dejar de disfrutar de las escuchas y sin cerrar círculos. En todos los géneros hay cosas que me gustan y los estados de ánimo mandan también.
    Como me alegra haber puesto justo tu disco favorito, de ese modo habrás esbozado una sonrisa al leer la entrada. 'Deuce' es una maravilla, es curioso que en su discografía fuera el disco de la controversia entre los medios. El tiempo pone cada cosa en su sitio, está visto.
    Lo de Rosendo puede parecer curioso, pero la verdad es que en la música de Leño y en su modo de tocar la guitarra en su carrera en solitario hay mucha influencia de Gallagher. Me gustaba mucho su rock urbano cuando tenía 15-16-17 años, jaja, me sé aún sus canciones de carrerilla, pero lo aborrecí por culpa de apuntarme a su club de fans (algún día te contaré bien esto, da para unas risas). Le guardo gran aprecio todavía aunque lo escucho muy poco ya.

    Voy de inmediato a ver esa pedazo de entrada que le dedicaste a este álbum.
    Un abrazo, figura!

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  7. Hola Natalia!

    Muchas gracias por tomarme en cuenta. He entrado a la página que me proporcionaste y por lo que me explicas veo que está muy bien la idea. Mucho éxito en el proyecto y ya enviaré la propuesta. Un placer!

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  8. Adorooo leerte y.... me das tanta alegría al cumplir mi petición, guapo! que te llenaré aún más de besos.

    Además leer los comentarios sobre la admiración que tienen por Rory!! es totalmente emocionante porque así es como él se proyectó y tanto al escucharlo como al verlo, se le podía notar la transparencia y ese más que gusto que tenía al estar acariciando a su guitarra... en pocas palabras, ... Rory es un maestro de la pasión!

    Y también mis respetos para Joaquim (aunque quizá no lea esto) porque a los grandes no hay que dejarlos en el olvido! así que a seguir escuchándolos hasta morir! :)

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  9. Has visto que éxito tienen tus peticiones? jaja, en cambio lo que pongo por iniciativa propia pasa más desapercibido que Sammy Pérez en Hollywood!! normal, tú gusto es exquisito (musicalmente al menos, jeje).

    Rory Gallagher era un artista como la copa de un pino. Transparencia es una palabra que le define la personalidad y la carrera a la perfección, tienes mucha razón. Lo cierto es que es maravilloso ver que coincidimos en nuestra percepción de su obra todos los aquí presentes.

    Ah! y yo si que te voy a llenar a besos, guapa, sabrosa, que te como!

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