miércoles, 5 de enero de 2011

MIDLAKE

THE COURAGE OF OTHERS (2010)

Shhh!!! no quiero hacer ni el más mínimo ruido para no incomodar a mi querido disco duro, que hoy parece que se ha levantado de buen humor y se ha dignado a funcionar, posibilitándome la extracción de uno de los discos que se ha agenciado a modo de secuestro, así que he elegido esta maravilla de la banda de Denton (Texas), Midlake, por ser uno de los mejores trabajos editados el último año y por ser una obra apacible, tranquila, suave y dulce que entra en nuestros oídos sin paliativos en una escucha dulce y ensoñadora. He de decir que esta tal vez sea una obra menor en comparación con su anterior lanzamiento, el fabuloso 'Trails of Van Occupanther', pero se puede entender que la diferencia entre ambos radica básicamente en el cambio de lo eléctrico por lo acústico en esa evolución de su sonido iniciada con aquel disco y que fue variando de una propuesta que se aproximaba a formaciones como Pedro The Lion, Radiohead o Granddady en su debut, hacía un presente marcado por el folk, el pop y el rock de los sesenta en estos dos últimos álbumes. 'The courage of others' es un delicioso tratado musical que se disfruta más cuando se está relajado, reflexivo o simplemente sensible, un placer auditivo que a muchos les sonará demasiado añejo, pero que superada esa primera impresión se captan un serie de matices en su discurso que consiguen una grata adicción por parte del oyente. Influenciado en sus textos por el disgusto que su supuso la ruptura amorosa de su vocalista con su pareja sentimental en el momento de su concepción, es precisamente ahí donde gana enteros la calidad del disco, quizás la razón también de ese intimismo, esa desnudez instrumental que hacen de esta última entrega algo realmente interesante. Once canciones de poso tierno que están repletas de jugosos elementos, tales como flautas, piano, dulcimer, autoharp, violín, percusiones, teclados y diversas percusiones que se hacen notar, y de que manera, en temas tan suculentos como el inicial "Aces of a man", que igual pensáis que he perdido el norte, pero en sus primeros acordes me recuerda algo al sobado "Nothing else matters" de Metallica, hasta que a medida que van pasando los segundos va ganando en épica contenida para acercarse más a los Jethro Tull de 'Thick as a brick', "Winter dies", donde las guitarras más recias del álbum entran en colisión sobre un fondo dulzón y melancólico que la convierte en una pieza sumamente emocional que deriva en pura energía, "Small mountain", tema favorito de su cantante Tim Smith, tal vez porque en ella se introduce en bellos recuerdos de su adolescencia, en una época en la que según cuenta la canción él acudía a diario a preparar las mesas de un restaurante propiedad de sus padres situado en la cima de un cerro, lugar idóneo para encontrar la paz interior de nuestro protagonista, "Core of nature", cuya melodía es simplemente sensacional, de esas que es mejor reproducir cuando tienes cerca los pañuelos porque llega a conmover con su fragilidad sentimental, "Fortune", que dibuja un halo de esperanza optimista en el metraje situándose en algún lugar entre Don McLean y Harry Nilsson, "Rulers, ruling all things", mi favorita por su espumosa tendencia sinfónica y su epopeya romántica, "Children of the grounds", una canción que se compuso bastantes años antes de la edición de este disco y que mezcla sus referencias clásicas y actuales de una manera notable, además de contar con el estribillo más inspirado del lote, "Bring down", la pista más bella sobretodo por ese precioso dueto de Smith con Stephanie Dosen, bellísima cantante folk de Wisconsin que descubrió en su momento el gran Simon Raymonde de Cocteau Twins y que también es conocida por sus colaboraciones en discos de Massive Attack y José González, e "In the ground", apesadumbrado final que describe a la perfección las intenciones de 'The courage of others', manifestarse como un fiel compañero que quiere acompañarnos en días de discordia personal y aburrida lluvia. Tim Smith, Alexander Paul, Eric Pulido, Eric Nichelson y MacKenzie Smith, que se conocieron durante su estancia en la Universidad de Texas, donde estudiaban jazz, forman Midlake, que para este trabajo contaron con la ayuda de Fionna Brice, Jesse Chandler, Max Townsley, y la antes mencionada Stephanie Dosen. El nombre del álbum proviene de una película del año 1966 llamada 'Andrei Rublev', y dirigida por el ruso Andrei Tarkovsky.

4 comentarios:

  1. A estos pájaros les conocí con este disco, lo escuché bastante a primeros de 2010 porque engancha de primeras, pero luego salieron trabajos de otros grupos que precisaron de mayor atención, y creo que con razón. Algo parecido me pasó con el de The New Pornographers. Es una música que al final, cuando la tienes muy oída, se hace un poco epidérmica, como que te acaba resbalando un poco y no acaba de quedar. Pero volveré a ellos lo prometo.

    La comparación con los Jethro Tull de 'Thick as a brick'... osada, cuando menos, ¡hereje!

    Algún palo te tenías que llevar, je, je.

    Nota: Por aquí nos alegramos un montón de la pronta recuperación de tu disco duro, ¡cuidalo!

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  2. Uf no me gustó nada este disco, me dió pena por ser quienes son pero para mi es un aburrimiento, no le encuentro la magia por ninguna parte, todas las canciones me parecen igual. tuve que mirar más de una vez que eran ellos porque no me lo podía creer, es curioso que te parezca uno de los mejores del año, en este caso no coincidimos.
    Pero si el disco duro es nuevo porque no lo llevas a la tienda ¿?, a ver si va a ser alguna pieza defectuosa, yo la gente que conozco que se han quedado sin disco duro ha sido por golpes y caídas.

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  3. Alto! cuidadín! achtung! jajaja, recibo el palo merecido pero alego defensa, Joaquim. Jetrho Tull es uno de mis grupos predilectos de siempre, prácticamente te puedo decir que empecé con ellos (junto a Pink Floyd, Yes y Marillion), asñi que si bien es cierto que la comparación es una autentica osadía por mi parte, la verdad es que me sirve de excusa que he dicho 'acercarse' que no 'sonar igaul de bien' jejeje. Recuerdo cuando por fin pude ver en directo a los de Ian Anderson y la decepción que me llevé visualemente, yo que le esperaba con toda la parafernalia de vestimenta y el tío aparece con una chaleco hawaiano, jajaja, vaya tela.
    Es cierto lo que dices de Midlake y cuesta de explicar, pero si es un disco que entra muy bien a la primera pero en posteriores escuchas se diluye. También lo pienso del de The New Pornographers. Eso sí! el anterior de Midlake es canela en rama. Aún así, me gusta este disco, porque recurro a él muy puntualmente y cuando necesito un ratito de estar relajado. así se disfruta bastante.
    Estoy contentísmo con lo bien que me va ahora el disco duro, tanto que no lo voy a desenchufar hasat dentro de quién suave cuánto, que no se puede tentar a la suerte, jeje.

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  4. Sé que no es santo de tu devoción este 'The courage of others', Viola, y lo entiendo perfectamente, ya que rinde muy por debajo de su antecesor. No obstante, me gusta, no me preguntes porque, ya que es lineal en cierto modo y parace que no vaya a despegar nunca, pero casi siempre que me da por escucharlo acierto con el momento. Es como un antidoto a un estado de ánimo en particular, no sé...me cuesta explicarlo.
    Lo del disco duro, toco madera, se ha solucionado por el momento. Era el cable de corriente, creo, porque le he puesto algo de cinta adhesiva y ahora encaja bien. Cosas raras que soluciono a los chapuzas, se me aparece la virgen y et voilá! espero que aguante porque el error fue que lo compré en Zaragoza y como que ir de propio allí...jeje.
    Tú ya sabes lo merluzo que puedo llegar a ser, así que no te sorprenderá que habiendo mil Mediamarkts en Barcelona, lo comparara allí a lo tonto Julián :P

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