THE FRESH & ONLYS

PLAY IT STRANGE (2010)

Como dije ayer, tenía pensado escribir sobre un disco que rezumara aromas primaverales pero cambié de opinión a última hora al hacerme eco de la efeméride sobre Kurt Cobain. Hoy ya no hay excusa para no compartir este disco al que tantas horas de escucha he dedicado en la última semana. El tercer álbum de esta banda de San Francisco (California) contiene todo lo que me entusiasma encontrar en una colección de canciones en estos días de bonanza climática. No puedo evitar disfrutarlo entero en cuanto le doy al botón de reproducción porque es mágico y delicioso de principio a fin. Ante la inminente salida al mercado de su nuevo trabajo (esta vez será un ep de cinco canciones que aparecerá dentro de veinte días) y la confirmación de su presencia en el próximo festival Primavera Sound, me ha parecido un buen momento para hablar de ellos. Su discográfica (In The Red Records), les describía muy bien en una hoja promocional, diciendo de ellos que practican un indie-rock garagero y psicodélico que gira hacia el pop de guitarras de los años ochenta de Go-Betweens, Jacobites o los primeros R.E.M. al tiempo que acoge ciertas influencias de Iggy Pop o The Gun Club. Yo añadiría algo más, como el hecho de que su sonido se apoya en el buen gusto por lo añejo y por las bandas sonoras de los spaghetti western de Sergio Leone. Solo puedo recomendar con fervor una oportunidad a esta banda, porque su propuesta está repleto de melodías crecientes, luminosa y cautivadoras que os hará pasar un buen rato. Además veréis asomar a buen seguro el espíritu de diversos grupos de vuestro agrado o cuanto menos conocidos por todos como The Doors, que flotan en el ambiente de la inicial "Summer of love", con ese ritmo esclarecedor y ese resplandor vocal pseudo-hippie, la increíble "Waterfall", mi favorita sin duda, donde las guitarras suenan magnas dibujando un universo liderado por su propia personalidad, en la que posiblemente sea una de las mejores canciones del pasado ejercicio, por su gancho y la innegable adicción que provoca, una de esas piezas que te cambian la vida o como mínimo el humor por su optimismo y ese resplandor que desborda esperanza, la veloz "Until the end of time", que sigue la senda bailable y tarareable abierta por su antecesora, mezclando lo mejor de Television Personalities y los antes citados The Gun Club, la soleada "Tropical island suite", que puede recordar a los más recientes Ganglians o Woods con el folk-rock alucinógeno por bandera en sus primeros minutos, pero como es una canción larga (casi ocho minutos), coge su propia forma acercándose del mismo modo a los primeros Deerhunter y los geniales Ducktails a posteriori, la punk-rockera "All shook up", a medio camino de Ramones y Best Coast en clave lo -fi, la adorable "Fascinated", cuya coralidad atmosférica inunda cada recoveco de nuestra habitación de romanticismo inocentón, la potente "Red light green light", con ese deje zumbón y ese ruido cargado de tesón psicotrópica capaz de trasladar su discurso a los 60's sin que nos demos cuenta de que es una banda de jovenzanos que en esa época aún daban vueltas en los testículos de sus respectivos padres, y la vacilona "I'm a thief", que me recuerda a mis queridos Caesars cuando se ponen nostálgicos, y a la que añaden un cierto tono orquestado en un símulo muy aceptable. Que no inventan nada nuevo y que son una más de las múltiples bandas que han salido últimamente que exprimen la herencia de The Beach Boys? puede, pero que bien sienta escucharlos, oye!. Tim Cohen, Shayde Sartin, Wymond Miles, Kyle Gibson son The Fresh & Onlys.