martes, 13 de mayo de 2014

JUAN SON

MERMAID SASHIMI (2009)

Restablecido de los males casi por completo, pues me falta iniciar una rehabilitación para recuperar la fuerza muscular en la zona afectada, vuelvo a reprender la marcha con el deseo de dar carpetazo a la mala racha y es por eso que quiero de una vez por todas dar vida a este blog que tan abandonado tengo por causas que se escapan a mi control. Como ya sabéis los que leísteis la última entrada, tuve una lesión de hombro que me obligó a permanecer mas de seis semanas con el brazo izquierdo en cabestrillo y eso borró cualquier intención de ir publicando cosas por aquí a excepción de ese mentado último escrito que gracias a las lindas manos de mi idolatrada Sra.Esmiz, se pudo finalmente plasmar. Paso página entonces a ese mal fario, empiezo de cero y hoy me enfrento solo al tema con el mayor de los entusiasmos a la hora de enarbolar los encantos infinitos de un disco espléndido que en esta temporada en el dique seco me ha acompañado por las noches para darme afecto y consuelo como ese amigo invisible que tienen los niños americanos en las películas de Spielberg. Es de justicia con lo dicho, que me ponga de nuevo a la faena reinaugurando este espacio con un artista que conocí a través de mi adorable colaboradora (la cual escribió algo divertido en su bitácora, 'Soy una pobre granaina', a colación de este repetorio) y más teniendo en cuenta que he cogido gran interés por el talento de este pequeño y joven genio de Guadalajara (Mexico), que antaño formó parte de los aclamados Porter y que debutó hace cinco años con este evocador 'Mermaid sashimi', recogiendo decenas de influencias y destacando ante todo por su potencial compositivo.

Llevaba tiempo atraído por las canciones de 'Atemahawke', la única obra editada por su banda madre, y también me había atrapado recientemente Aeiou, su proyecto a medias con Simone Pace (uno de los gemelos que forman junto a Kazu Makino, los magníficos Blonde Redhead), pero hace unas semanas profundicé más en las paredes de esta ópera prima en solitario y quedé embobado en cada destello creativo. Este muchacho es un genio, más allá de que desvarié con la interpretación de sus locuras experimentales a través de marcianos vídeos (se pueden encontrar muchos de ellos en la red grabados en plan casero) y de su estrafalaria actitud espontáneamente infantil, tan entrañable como inclasificable, su propuesta es fantástica, excitante y prodigiosa. Se puede describir su discurso como sorprendente, porque cada segundo que pasa aumenta su disposición al crecimiento de la originalidad. Uno oye las pistas una a una y en su memoria aparecen Chris Garneau, Kate Bush, Björk, Eurythmics, Windmill, Jónsi, The Postal Service, Matmos, The Notwist, Bat For Lashes, Aphex Twin, Patrick Wolf o Air, como posibles fuentes de inspiración y claro, solo queda quitarse el sombrero ante tal derroche de ambigüedad en su registro vocal y sus incesantes  variaciones estilísticas que abarcan el pop de cámara o barroco, el rock alternativo, la indietrónica y el trip-hop onda Portishead. Un primer paso valiente y arriesgado, muy propio de nuestro protagonista que es un tipo que no necesita sardinas para beber agua y hace siempre lo que se le antoja y en el que todo se cubre con teclados de aire lo-fi, beats descentrados y unas letras en inglés y castellano dotadas de lírica abstracta.

Allá donde Animal Collective se asfixian en ruidismo electrónico sin dejar huecos donde respirar y donde Sigur Rós nubla de distorsiones las atmósferas, nuestro amigo amplia horizontes para que podamos abrir los pulmones y entremos en calor sintiendo que hemos encontrado un hogar donde estar protegidos, sin temer al estruendo provocado por los fuegos artificiales del exterior, regresando a una inocencia que añorábamos. De algún modo estas doce piezas nos transportan a otro lugar, quizá a un mundo de fantasía, de nostalgia, melancolía, como una reconfortante emoción que nos hace volver a sentir como niños inquietos, esa belleza que une ideas atemporales y que también plasma Tim Burton en su filmografía, y es que de hecho su mensaje tiene puntos en común con las bandas sonoras que hacía Danny Elfman para el cineasta de Burbank (California), conclusión a la que acabo de llegar por mediación de mi querubín, que tanto me ayuda a ver las cosas con claridad.

Posiblemente despierta tantos aprecios como animadversiones en su país de origen, pero es indudable su destreza a la hora de crear y su maestría a la hora de cantar, siendo poseedor de una de las voces mas dotadas del panorama musical en la actualidad. Su registro es de esos que adoras o detestas a la primera escucha, tal como pasa con Antony Hegarty de Antony & The Johnsons, Santi Balmes de Love Of Lesbian o Hayden Thorpe de Wild Beasts, por citar solo algunos ejemplos. Yo soy de los que lo defienden a ultranza en ese aspecto. Además me cae bien, lo veo como un chico que no quiere crecer y disfruta de sus aficiones con la mayor de las pasiones, que lucha contra su timidez haciendo lo que mas le gusta en definitiva y que comparte su afición con otras personas que como él tienen sus momentos de flaqueza y sus momentos de esperanza. Por eso sus textos también son muy intimistas y se desnuda emocionalmente en ellos. Su particular universo de magia y fábula suena más fulgurante y propio que nunca en temas tan fenomenales como "The remains", con ese inicio teatral que en cierta manera puede emparentarse con la perspectiva del actor Ryan Gosling a través de su proyecto musical Dead Man's Bones, incorporando a la propia energía de los loops y secuencias digitales, unos gorgoritos que salen de sus entrañas y unos golpes accidentales que le dan un prisma reluciente al corte, sumándole un final sintetizado que parece tomado a préstamo del "Army of me" de la islandesa Björk, "Nada", un rayo solar optimista donde destaca un bajo marcado que es seguido por un ritmo constante que incita al baile abrumado por una loable belleza orquestal, emulando los momentos de gloria de su adorada Annie Lennox, "Mermaid sashimi", la cual da nombre al disco y que sube las revoluciones en cuanto a movimiento, aunando la danza más coqueta con el pop edulcorado, una ofrenda pagana en ácido cuyos héroes son seres mitológicos sumergidos, pasando de la tranquilidad a la angustia por no poder salir a la superficie, "Goldfish", reminiscencias de The Cure, con un ritmo de lo más agradable y fácil de digerir, y en donde su voz luce a todo lo que da, una verdadera joya sonora, "En camilla al quirófano", celestial introducción para "Captain whirlpool", que se inicia con un sonido que parece emular un envoltorio de caramelo despegándose al compás de un scratch circense de semi-vals, sin duda uno de los cortes más desconcertantes del lote y no necesariamente dicho en el mal sentido, pop opaco de texturas y capas ariscas, "Marianela", breve instrumental que recupera los violines del tema de apertura del álbum, "El resplandor", con una trompeta sampleada que da la bienvenida al palacio acuático, con coros fuertes,  sencillos y pegadizos, "Monitor flotando muestra señal", que prescinde de voces salvo por algunas frases ocasionales distorsionadas en vocoder muy bien trabajadas, "Toma esta menta", tic-tac de relojes en progresión para dar entrada a un medio tiempo que navega sobre el reggae y el cabaret contemporáneo, barnizando su espíritu libre de pop y jazz, y el elegante tributo "Ana Paula", dedicado a una amiga suya que falleció, un sube y baja entrecortado con una segunda parte que aleja la tristeza y recobra el animo para terminar feliz y saber que la imanación no tiene limites.

Juan Carlos Pereda o lo que es lo mismo Juan Son, tuvo como compañeros en esta aventura discográfica a César López (que tiene un par de discos en solitario en clave de jazz), Chemin Santillanes (colaborador de Hombres G, Shock Bukara y Sweet Electra), en tareas de instrumentación, y a Alex Pérez y Don C.Taylor (con una impresionante hoja de servicios que incluye los nombres de Pixies, Rod Stewart, Incubus, James Blunt, Elliot Smith, Cake, Los Tigres Del Norte, Julieta Venegas, Alice In Chains, Seal, Guided By Voices o Korn), tras los mandos en labores de producción.

12 comentarios:

  1. Juan Son. Un músico interesante al que, quizá sólo le falte más empaque comercial. Suena bien, Txarls; por cierto, no sé si te acuerdas de mí o te lo dije: soy el antiguo propietario del Apetitte For Prostitution con nuevo blog. Lo verás en mi perfil, si te apetece pasarte, ya sabes. Los inicios son duros jajajaja ¡Un abrazo!

    ResponderEliminar
  2. Me alegra mucho que ya vayas mejorando del hombro!! y ese mes con cabestrillo si que fue una locura, fuiste un bien portadito, te cuidaste y ahora a empezar la rehabilitación, que eso es muy importante, verás que saldrá todo bien.

    Sobre Juan Son, no puedo agregar mucho, hemos hablado de él con mucha pasión!! hiciste una entrada genial! ya tenía muchas ganas de que lo pusieras por el blog y qué mejor que empezar con él. Gracias, corazón por mencionarme y enlazar jaja esa publicación jaja tontaina que le hice. Ya sabes que "The remains" es mi tema predilecto, ¿sabías que los sonidos de los cristales en esa canción son copas que rompían? jaja, por cierto, no pusiste cual tema es tu favorito, o no tienes?. Besos en tu boquita comestible!

    ResponderEliminar
  3. Claro que me acuerdo de ti, artista! que tal vas? hace tiempo que quiero pasar a comentar por tus aposentos pero me he limitado a entrar y leer desde que retomaste la aventura de escribir en un blog a causa de una jodida lesión de hombro que me imposibilitaba la tarea de usar las dos manos para teclear. De mañana no pasa y si que los inicios son duros pero lo que importa de esto es sentirse bien uno mismo soltando ladrillos sobre lo que nos gusta, jeje. Por cierto, te añadí a blogs que sigo hace unas semanas, justo el día después de ponerme en sobreaviso :P

    El amigo Juan Son me parece un artista incomparable, con un talento infinito, pero como bien dices, aún le queda cruzar ese listón de popularidad que parece estar tan alto para algunos y bajo para otros.

    Un abrazo, crack!

    ResponderEliminar
  4. Muchas gracias mi princesa ;)
    Como bien sabes, voy poco a poco y siendo muy prudente, hago todo cuanto me recomienda mi chica, como mandan los cánones, jeje.

    Aprovecho estas líneas para darte las gracias infinitas por compartirme la música de Juan Son, sus Porter y todos los grupos de tu país que me has venido aconsejando escuchar desde que nos conocemos. Hay muchísimas cosa de calidad por allí, grupos que se me antojan muy frescos y buenos, ya sean actuales o añejos, como los que puse en su día por aquí provenientes del movimiento que surgió tras el festival de Alvarado.
    Tú publicación quedó genial y muy divertida, mucho más que esta sarta de palabras que he publicado yo y que tal vez sea plomiza, por eso la enlace, para quien lea esto tenga la oportunidad de pasarse por tu casita cibernética y coger aire para sonreír, pues tu propones una manera mucho más amena de conocer su disco y para mi eso es muy loable...por mucho que te emepeñes en hacer alarde de modestia, tienes un Don, lo siento pero no me cansaré de repetirme en eso :D

    Respecto al por que de que no pusiera cual es mi tema favorito es porque no tengo uno solo, jaja, hay cuatro temas que me encantan y no puedo decantarme por uno, ya que son muy distintos entre si. Mira, 'The remains' es fascinante, un inicio arrebatador (que bueno lo de los cristales, que original este chico), 'Nada' es un hit de campeonato, que buena, y la voz es bestial, esa diría que es la mas pegadiza, "Mermaid sashimi", tan simpática e imponente a la vez, y "Goldfish", sencillamente mágica...uhmmmnn, no sé, bueno si! me quedo con 'The remains', porque es la favorita de mi adorada :)

    Muaaaaaaaas en toda tú!

    ResponderEliminar
  5. No fuerces demasiado ese hombro Txarls no vaya a ser peor el remedio que la enfermedad ; me alegro de que haya mejorado y eso te posibilite hacer una vida mas o menos ´normal ¨ ; sigue así , dando caña al teclado para seguir dando a luz talentos que , como los de Juan , se nos escapan de los oidos sin labores como la tuya al compartirlos.
    Abrazo desde la tierra del Cierzo !

    ResponderEliminar
  6. Gracias por el consejo Jesús! con sumo cuidado voy, con mas miedo que alma según que gesto, el otro día sin ir más lejos, fui a ver a mis compañeros entrenar y me cayó un balón en las manos que lancé a canasta ante su insistencia...creo que nunca había tirado una 'piedra' de semejantes dimensiones, jaja, se me encogió el brazo instintivamente. Casi mejor me dejo de pamplinas y cuelgo las botas, que total no deja de ser un hobby y si me va a perjudicar el día a día, es tontería enredar :P

    Con el blog seguiré, claro, con la mayor ilusión por seguir eligiendo cosas con acierto, como el disco del amigo Juan Son, que no sabes cuanto me alegra encontrar gente que le guste a pesar de su peculiaridad sonora.

    Un abrazo grande y que sepas que me ha hecho reír ver tu foto de perfil de google+ (también me rei en su día con la de blog. Comparto tu devoción por Faemino y Cansado, los más mejores del mundo mundial!

    ResponderEliminar
  7. Welcome back my brother in arms, te hacía desaparecido para siempre, todo vuelve a su orden natural, por fin.

    ResponderEliminar
  8. Ya estoy de vuelta! aún sin dar mucha guerra, pero pronto me pongo las pilas por aquí y por 'My fall from grace' que tengo mucha tela que consumir por allí, jeje.
    Un abrazo!

    ResponderEliminar
  9. Vozarrón, y pedazo de arreglos. Detrás del inglés se puede escuchar el mexicano que lleva dentro y no molesta en absoluto. Ánimo con la recuperación. "¿para qué nos caemos, amo Bruce (Wayne)? PAra volver a levantarnos." Le decía el bueno de Alfred Pennyworth.

    ResponderEliminar
  10. Que bien que te haya gustado la propuesta de este zagal, que a pesar de su juventud ya lleva bastante en esto. Su voz es tan dotada como su talento (si pones Juan Son en YouTube verás vídeos caseros suyos, francamente marcianos. Tipo peculiar donde los haya, más raro que un perro verde) y tanto por libre como con Porter y Aeiou, siempre resalta. Ahí van dos botones de muestra...

    https://www.youtube.com/watch?v=_xpPvNksLC8

    https://www.youtube.com/watch?v=dc7skcLCT0Q

    Tengo un poco abandonado esto en apariencia, pero tengo tres entradas under construction, jeje, a ver si me espabilo :P

    Ayer jugué un par de minutos con mi equipo y me cundió para meter un canastón y agarrar dos rebotes, quien tuvo retuvo oiga, jaja, pero en defensa nulo, voy con mas miedo que alma, de hecho solo jugué para decir que no lo dejé como lo dejé el día de la lesión. El Domingo la final y sin poder ayudar, grrrr, que rabia!

    Espero que estés bien gran caballero oscuro (la frase me ha tocado la fibra).
    Un abrazo!

    ResponderEliminar
  11. Es que lo de que el balón toqué la red... O, mejor, la acaricie, da la vida! Cada día valoro más a tíos de este palo, sin una gota de vergüenza a la hora de ponerse a experimentar, personalmente, no es mi estilo, pero lo valoro precisamente por eso. Abrazos.

    ResponderEliminar
  12. Creo que te puede gustar mucho lo que hace el francés Cascadeur, porque entra en ese lustroso y granado grupo de artistas arriesgados como Juan Son, pero creo que su música y voz son un pelín mas accesibles (en su discurso priman las orquestaciones). Por ahí tengo el disco posteado, escúchalo a ver que te parece.

    Que sabias palabras las primeras de tu comentario, si es que es verdad, da la vida, coño :D
    Esta semana jugamos la final y no quise arriesgar más que un minuto cuando estaba todo sentenciado (por desgracia en nuestra contra. El rival tenía varios negros...son una raza superior, a los dos minutos íbamos con la lengua fuera y ellos frescos como una lechuga), pero hice la rueda de calentamiento y cada vez que oía el 'chof' de la pelota entrando en el aro y, como tú bien dices, acariciando la red, ohhhh.

    Cuídese, caballero!

    ResponderEliminar