PUZZLE (2007)
Hace un par de años con motivo de la visita de Queens Of The Stone Age a Barcelona, en el que fue uno de los conciertos más incómodos de mi vida por culpa de los jaleos de faldas existentes entre un amigo y una pájara que andaba por allí con su pareja, tuve la fortuna, distorsionada por las circunstancias, de ver a este genial trío de Kilmarnock (Escocia), de los que tan solo sabía que habían ejercido de teloneros pocas semanas antes de los británicos Bloc Party. Eran una incógnita que me llevó a pensar que en vistas de la diferencia de sonido de las dos bandas para las que habían abierto, tenían que sonar realmente personales y variados en estilo, y así fue. De hecho, en honor a la verdad tengo que decir que al principio no sabía ni cuál era el nombre del artista invitado, pero a la segunda canción resolví la duda gracias a un chivatazo de alguien de la barra de la sala, así que me introduje en su particular ideario para degustar básicamente las canciones de este cuarto disco de estudio, llamado 'Puzzle', que fue al que más tiempo dedicaron en directo. Al día siguiente busqué sus discos y sin lugar a dudas el protagonista de hoy es su mejor trabajo hasta la fecha. Con él encontraron por fin una identidad y una madurez que ansiaban en los irregulares ejercicios de estilo tratados en sus tres primeros pasos. Una propuesta que se asemeja mucho a lo que hacían en sus inicios Foo Fighters, pero con espacio para otras influencias más clásicas como pueden ser Metallica, Nirvana o Rush. Aún con todo, ese gusto por conseguir un estilo propio de fijación rockera, no está en absoluto peleado con el hecho de ser accesibles y su música puede gustar y mucho a todo aquel que disfrute con el indie rock, el power pop y el rock alternativo americano de los 90's, puesto que también se asoman Pixies, Weezer y Red House Painters. Lo más granado de esta excelente obra viene de la mano de la apasionante "Living is a problem because everything dies", con la presencia de la Seattle Symphony Orchestra dando un tono épico a base de lustrosos instrumentos de cuerda y belleza coral sobre una melodía preciosa, la poderosa "Saturday superhouse", que recuerda una barbaridad a la ya por derecho propio, mítica formación liderada por Dave Ghrol, con un ritmo incansable y furtivo que la convierte en una de las piezas mas inspiradas del lote, la fabulosa "Who's got a match?", con sabor británico en su base de espíritu bailable dentro de una impecable sobriedad, la enorme "As dust dances", emotiva y personal en su intimismo reposado alcanzando la finura del mejor emocore noventero, la abismal "A whole child ago", una maravilla que navega entre los mejores Weezer, los Bloc Party de 'Silent alarm' y los Foo Fighters de su debut homónimo, con unas guitarras explosivas y un estribillo sensacional, mi favorita sin duda, la en principio explosiva "The conversation is...", que sobre la marcha se erige en una magnifica pieza de rock complaciente, reinada por las estupendas polifonías interpretadas por sus tres miembros, la progresiva y experimental "Now i'm everyone", que podría encajar en algún lugar entre los discos más cálidos de los progresivos Voivod y los Muse de 'Showbizz', la dócil "Love has a diameter", posiblemente la canción más profunda y bonita del disco, por esa sutileza estilística cercana al space-rock, y esas atmósferas aéreas o lo Killers o Feeder, la soberbia "Get fucked stud", que roza el metal más elegante con unos riffs extraordinarios, y las tiernas "9/15ths" y "Machines", que ponen la nota barroca y folkie, respectivamente, para cerrar un disco espléndido que con toda la justicia del mundo se encaramó a lo más alto de las listas británicas consiguiendo un elevado número de ventas. Para conseguir el clima adecuado para dotar a estas canciones de hermosura ambiental Neil Simon y los hermanos Ben y James Johnston, se desplazaron a la ciudad canadiense de Vancouver (British Columbia), contando con la colaboración de Dorothy Lawson, Mike Norman, Ben Kaplan, la ya citada Seattle Symphony Orchestra y el afamado arreglista Graeme Revell.
PUZZLE (2007)
Hace un par de años con motivo de la visita de Queens Of The Stone Age a Barcelona, en el que fue uno de los conciertos más incómodos de mi vida por culpa de los jaleos de faldas existentes entre un amigo y una pájara que andaba por allí con su pareja, tuve la fortuna, distorsionada por las circunstancias, de ver a este genial trío de Kilmarnock (Escocia), de los que tan solo sabía que habían ejercido de teloneros pocas semanas antes de los británicos Bloc Party. Eran una incógnita que me llevó a pensar que en vistas de la diferencia de sonido de las dos bandas para las que habían abierto, tenían que sonar realmente personales y variados en estilo, y así fue. De hecho, en honor a la verdad tengo que decir que al principio no sabía ni cuál era el nombre del artista invitado, pero a la segunda canción resolví la duda gracias a un chivatazo de alguien de la barra de la sala, así que me introduje en su particular ideario para degustar básicamente las canciones de este cuarto disco de estudio, llamado 'Puzzle', que fue al que más tiempo dedicaron en directo. Al día siguiente busqué sus discos y sin lugar a dudas el protagonista de hoy es su mejor trabajo hasta la fecha. Con él encontraron por fin una identidad y una madurez que ansiaban en los irregulares ejercicios de estilo tratados en sus tres primeros pasos. Una propuesta que se asemeja mucho a lo que hacían en sus inicios Foo Fighters, pero con espacio para otras influencias más clásicas como pueden ser Metallica, Nirvana o Rush. Aún con todo, ese gusto por conseguir un estilo propio de fijación rockera, no está en absoluto peleado con el hecho de ser accesibles y su música puede gustar y mucho a todo aquel que disfrute con el indie rock, el power pop y el rock alternativo americano de los 90's, puesto que también se asoman Pixies, Weezer y Red House Painters. Lo más granado de esta excelente obra viene de la mano de la apasionante "Living is a problem because everything dies", con la presencia de la Seattle Symphony Orchestra dando un tono épico a base de lustrosos instrumentos de cuerda y belleza coral sobre una melodía preciosa, la poderosa "Saturday superhouse", que recuerda una barbaridad a la ya por derecho propio, mítica formación liderada por Dave Ghrol, con un ritmo incansable y furtivo que la convierte en una de las piezas mas inspiradas del lote, la fabulosa "Who's got a match?", con sabor británico en su base de espíritu bailable dentro de una impecable sobriedad, la enorme "As dust dances", emotiva y personal en su intimismo reposado alcanzando la finura del mejor emocore noventero, la abismal "A whole child ago", una maravilla que navega entre los mejores Weezer, los Bloc Party de 'Silent alarm' y los Foo Fighters de su debut homónimo, con unas guitarras explosivas y un estribillo sensacional, mi favorita sin duda, la en principio explosiva "The conversation is...", que sobre la marcha se erige en una magnifica pieza de rock complaciente, reinada por las estupendas polifonías interpretadas por sus tres miembros, la progresiva y experimental "Now i'm everyone", que podría encajar en algún lugar entre los discos más cálidos de los progresivos Voivod y los Muse de 'Showbizz', la dócil "Love has a diameter", posiblemente la canción más profunda y bonita del disco, por esa sutileza estilística cercana al space-rock, y esas atmósferas aéreas o lo Killers o Feeder, la soberbia "Get fucked stud", que roza el metal más elegante con unos riffs extraordinarios, y las tiernas "9/15ths" y "Machines", que ponen la nota barroca y folkie, respectivamente, para cerrar un disco espléndido que con toda la justicia del mundo se encaramó a lo más alto de las listas británicas consiguiendo un elevado número de ventas. Para conseguir el clima adecuado para dotar a estas canciones de hermosura ambiental Neil Simon y los hermanos Ben y James Johnston, se desplazaron a la ciudad canadiense de Vancouver (British Columbia), contando con la colaboración de Dorothy Lawson, Mike Norman, Ben Kaplan, la ya citada Seattle Symphony Orchestra y el afamado arreglista Graeme Revell.
su ultimo CD es "Only Revolutions" 2009
ResponderEliminarYa ,ya, y está bastante bien por cierto, aunque para mí este supuso un gran cambio en comparación con 'Infinity land' y 'Blackened sky' y es al que más cariño le tengo...aunque llegara primero a él que a los otros. Acostumbro a citar el último disco de cada banda si posteo el anterior, pero esta vez no sé porque no he hecho tal mención.
ResponderEliminarEn fin...gracias por pasarte por aquí y comentar.
Un abrazo, Xixe.